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viernes, 18 de junio de 2010
Haunted Summer (Chris Young)
(...) Ivan Passer’s film “Haunted Summer” is not only a beautiful period piece about the interactions of these two radical romantic poets, but is also poetic itself. It imaginatively conjures up the thoughts, words and actions of the characters and successfully seduces us into particupating in their lives. Most importantly, I feel, the film expresses the youthful effervescence of the obsessive love of life shared by a quintette of creative thinkers.
During my meetings with Ivan he repeatedly stressed his hopes that the music might gently capture and reflect this passion. It was his feeling that since the film addressed the subject of youth and youthfulness (the oldest member of the group was 28, the youngest 18) the musical vocabulary need not be true to the period. Rather, he felt it could act as a sort of musical time tunnel in which these past events could take on a contemporary guise. Excluding the source music, the score ultimately became the only element of the film which was not historically pure. To create a score which would credibly serve a film set in 1816 and simultaneously be semicontemporary was truly a challenge.
We finally chose to use a small ensemble of synthesizers and a handful of acoustic instruments (including Swiss Alphorns). The material in general is very tonal, written in simple closed form homophonic structures, emphasizing 4 and 8 bar melodies. I felt that in order to retain a sense of warmth in the score I would primarily use samples of acoustic instruments for the synthesizer sound sources. Though the harmonic vocabulary encompasses a wide variety of periods, the majority of it, oddly enough, was inspired by the Lute music of the Rennaissance.
(Christopher Young)
Pocas veces un trabajo me ha hechizado (¿o debería decir mejor “encantado”?) del modo en el que este mágico score de Christopher Young lo ha hecho. Toda una sorpresa de un compositor del que, hasta este momento, todo lo que había escuchado, con la excepción quizás de "Invaders from Mars", sacaba a relucir el poderío y la magnificencia orquestal con la que Christopher Young ambienta las pesadillas cinematográficas en las que trabaja.
Pero claro, "Haunted Summer" no puede considerarse una película de terror, y como declara el compositor en los comentarios incluidos arriba, el tono de la película requería algo de otra índole, algo atemporal que refleje el mundo interior de los protagonistas, sus miedos y deseos, su pasión por la vida en definitiva. Y vaya si lo consigue.
"Haunted Summer" es un trabajo concebido casi exclusivamente para sintetizador, con los cuales el compositor recrea, desgrana, construye, extiende… un paisaje atemporal, en ocasiones mágico, onírico, de fábula… y en otras ocasiones misterioso y espectral. Es una obra embriagadora en su belleza, de ésas que te atrapan y te transportan a un mundo de ensueño en donde todo puede ser posible. Se trata de una música con un fascinante e irresistible poder evocador. Desde el primer corte hasta el último formula un hechizo que nos atrapa y envuelve en su red, no devolviéndonos a nuestras vidas cotidianas hasta que se hace el silencio… y aún entonces perduran en nuestro interior ecos de un viaje interior mágico y sobrenatural. Tal es el poder de esta Obra Maestra absoluta.
Este componente mágico de la música se sustenta en el uso de, como antes mencioné, bellas pero simple melodías mecidas en estimulantes e imaginativas atmósferas y paisajes sonoros para sintetizador, como puede apreciarse en el primer corte del score, titulado Haunted Summer, que volverá a aparecer posteriormente como por ejemplo en los cortes 3 ("Villa Diodati") y 11 ("Hautings: Mont Blanc"). Este motivo nos transporta atrás en el tiempo, a una remota villa junto a un lago de ensueño, nos presenta a los personajes, de cuyas plumas surgieron tantas y extraordinarias obras. Es necesario cerrar los ojos, tumbarse cómodamente en algún sofá o en la cama, y dejarse llevar.
El siguiente corte, "Menage", presenta uno de los temas más hermosos y sublimes del score, interpretados por el violín, y que también volverá a hacer acto de presencia, en este caso interpretado por una flauta, en el corte 9, "Alby". Una vez que Young ha capturado nuestra atención nos seduce con una exquisita y delicada melodía cargada de melancolía ante la que es imposible mantenerse indiferente. Es el material del que están hechos los sueños.
Pero lo mejor está aún por llegar. Nos referimos al corte cuatro, "The Night Was Made for Loving". ¡Dios, qué música más hermosa! Delicada, intimista, sin buscar excesivo protagonismo, ni destacar, ni epatar… simplemente conmovernos con su infinita dulzura y la magia que transmite. Resulta difícil hacer justicia a este tema, en mi opinión personal uno de los mejores de toda la carrera de Christopher Young, pese a encontrarse en las antípodas del tipo de música que lo ha convertido en uno de los grandes compositores de música de cine. No esperéis melodías grandilocuentes, ni coros… sólo el dulce, cristalino y titilante sonido del sintetizador, esbozando una melodía encantada ante la que es imposible mantenerse indiferente. Este tema supone uno de los momentos más intimistas, románticos y bucólicos del score.
A continuación viene uno de los escasos momentos oscuros y opresivos del score, "Polidori’s Potions", cargado de efectos desasosegantes, inquietantes y misteriosos. En el minuto 2:00 se introducirá una siniestra melodía para violín que volverá a hacer acto de presencia en el último y magistral corte del álbum. Pese a lo terrorífico que resulta, el tema nunca recurre a la disonancia estruendosa de otros trabajos suyos como "Leyenda Urbana", por poner un ejemplo. La música inquieta, te provoca escalofríos, pero nunca resulta incómoda o insoportable de escuchar. Es un terror más sutil, metafísico.
El siguiente corte, "Ariel", rescata las melodías y ambientes oníricos del primer corte, como una ingenua canción de cuna que nos mece con dulzura hasta que cobra una mayor intensidad, zarandeándonos y zambulléndonos en profundos océanos formados por sueños. Este viaje por el interior de nuestros sueños prosigue en el siguiente corte, "Confreres", en un tono muy similar al anterior, hasta la presentación de un nuevo motivo para flauta poco antes de llegar al minuto 1 del corte. Todo rezuma delicadeza y ensimismamiento.
En el siguiente corte, "Geneva", dedicado al famoso lago, las cuerdas presentan un nuevo y bellísimo motivo musical, inspirado en la música renacentista, y que volverá a hacer acto de presencia también en el último corte. Es un tema corto, sencillo, muy bonito, y que evoca a la perfección una tradición musical pasada. Antes de llegar al épico corte que cierra el cd nos encontramos con el soberbio "An Unquiet Dream", que supone una nueva e irresistible invitación a un fascinante viaje interior. Una maravilla más.
Y llegamos al final, el antológico "Hauntings", corte de épica duración (18 minutos) y estructurado en cuatro partes: 1) "Hotel d’Angleterre"; 2) "In the Caves of Chillon"; 3) "Incubus"; 4) "Mont Blanc"... del cual el propio compositor comenta en las notas del cd:
The selection “Hauntings” is a collage of material recorded for the film and later electronically manipulated via stereo sampling. I see it as, perhaps, a musical reflection of Mary Shelley’s point of view – the music and sounds she may have experienced, reactions to her environment and events that summer, nightmares that may have given birth to “Frankenstein”, and finally her own joy of life. (Christopher Young)
El corte empieza con un bucólico y muy hermoso ostinato para piano, que evoca ensoñación y romanticismo. Pasado el primer minuto, se introducen dos motivos, uno que ya había aparecido en el corte "Polidori’s Potions", y el que constituía el corte titulado "Geneva". El efecto es espectacular. La música deja ya de sonar idílica, los distintos motivos se superponen, sonando a la vez, cada uno por su lado, ignorando el resto, y consiguiendo un efecto terrorífico y malsano, como si la autora Mary Shelley estuviera teniendo una horrible pesadilla, la misma pesadilla que germinará en "Frankenstein".
Este sutil y escalofriante enfrentamiento melódico se prolongará hasta el minuto 5; a partir de este minuto la música se tornará atmosférica y asfixiante, con nuevos efectos sonoros pavorosos que describirán el desarrollo de la angustiosa pesadilla de la escritora. El nombre “Chillon” hace referencia de hecho a un castillo erigido sobre un islote del lago Lemán, y que constituye uno de los monumentos más populares de Suiza. De hecho, su ideal ubicación entre el lago y la montaña le confiere un encanto irresistible al que sucumbieron numerosos autores románticos.
Llegados al minuto 9 vuelve el motivo siniestro para violín presentado en el corte "Polidori’s Potions", acompañado de cantos fantasmagóricos y otros efectos sonoros. La música parece querer salir de aquella pesadilla en el minuto 11, como anunciando el fin del horror, y vaticinando el futuro resultado de aquella experiencia sobrecogedora.
De este modo, en el minuto 13 empieza a cobrar fuerza el tema que abriera el score, en el corte "Haunted Summer", dispersando la oscuridad precedente, volviendo a bañarnos en aquella prístina luz, y cerrando un álbum perfecto de la misma manera que lo abrió, en un torbellino luminoso que nos devuelve a la monotonía de nuestras vidas tras aquel extraordinario viaje, prometiéndonos nuevas experiencias, nuevas aventuras sonoras más allá del tiempo.
Poco más que añadir, realmente. "Haunted Summer" puede que no sea un trabajo para todos los gustos, y que los fans de la vertiente más orquestal del compositor no lleguen a conectar con esta extraordinaria propuesta sonora, pero en lo que a mí respecta nos encontramos ante una de las obras imperecederas del autor, y una joya de la música de cine que nos recuerda la importancia de los sueños y nos invita a dejarnos llevar por ellos, ya sea dormidos o durante la vigilia, justo como aquellos poetas y escritores románticos que confiaban en el poder inspirador de los sueños para dar vida a sus más célebres e inmortales creaciones.
Calificación de la banda sonora: ***** sobre *****
Tracklist
1. Haunted Summer – 2:45
2. Menage – 4:40
3. Villa Diodati – 3:38
4. The Night Was Made for Loving – 7:03
5. Polidori ’s Potions – 4:13
6. Ariel – 2:03
7. Confreres – 2:04
8. Geneva – 1:29
9. Alby – 2:38
10. An Unquiet Dream – 5:30
11. Hauntings – 18:00
a. Hotel d’Angleterre
b. In the Caves of Chillon
c. Incubus
d. Mont Blanc
Escrito por: Luis
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